Prensa Kapé Kapé- Venezuela cuenta con un marco legal sólido que reconoce y promueve la educación intercultural bilingüe (EIB) como un derecho fundamental de los pueblos indígenas. Sin embargo, la implementación efectiva de este modelo educativo se enfrenta a numerosos desafíos para el acceso a una educación de calidad para los niños y niñas indígenas.
Un avance legislativo crucial
Desde 2016, la Ley de Educación Intercultural Bilingüe representa un hito en la garantía del derecho a una educación propia de los pueblos indígenas. Esta ley, en consonancia con la Constitución de 1999 y la Ley de Pueblos y Comunidades Indígenas, busca preservar las lenguas y culturas indígenas, fomentando el aprendizaje en el idioma materno y valorando los conocimientos tradicionales.
A pesar de este marco legal favorable, existe una serie de obstáculos que impiden el pleno desarrollo de la EIB en Venezuela, como el alto porcentaje de escuelas indígenas que carecen de espacios adecuados, servicios básicos como agua potable y electricidad, y programas de alimentación escolar regulares.
La importancia de la educación intercultural bilingüe
La EIB no sólo permite preservar las lenguas y culturas indígenas, sino que también mejora el rendimiento académico de los estudiantes, fortalece su identidad y promueve la interculturalidad. Sin embargo, para que este modelo educativo sea exitoso, se requiere una inversión significativa en infraestructura, formación docente y recursos educativos pertinentes.
Una tarea de todos
En el marco del Día Internacional de la Educación Intercultural Bilingüe, Kapé Kapé hace un llamado a trabajar de manera conjunta para superar los desafíos que enfrenta la EIB en Venezuela.
Es fundamental fortalecer la infraestructura escolar, capacitar a docentes en lenguas indígenas y pedagogías interculturales, y promover su contratación en las escuelas indígenas y desarrollar materiales educativos que reflejen la diversidad cultural de los pueblos indígenas y que estén adaptados a sus contextos.
La educación intercultural bilingüe es una inversión en el futuro de los pueblos indígenas de Venezuela. Garantizar el derecho a una educación de calidad es fundamental para promover el desarrollo integral de estos pueblos y construir una sociedad más justa y equitativa.