DONALD TRUMP INTENTA CONVERTIR UN CEMENTERIO ACTIVO EN UN RESORT. EL SÍNDROME DE LA ENFERMEDAD DEL PODER ES SU SUSTRATO

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Análisis de la conducta Presidencial de Donald Trump, en hipótesis práctica e histórica, elaborada por Óscar Ceballos Abogado UCV Politólogo MD. Especialización en Administración Pública, Athens. Ohio University Ex Inspector de Tribunales.

Las recientes intenciones del Presidente Donald Trump de expulsar a los Palestinos de su tierra natal y construir en la Franja de Gaza un Resort, es equivalente a construir un Resort en Auschwitz. Gaza, es el actual campo de los horrores, muertes y destrucción activa realizado por el gobierno de Israel.

El resultado político de esta propuesta ha sido: Un repudio internacional y la posibilidad de una unión nunca antes vista, la de la Liga Árabe, separados por la geopolítica de intereses de las grandes potencias y las potencias regionales emergentes. Todos estos rechazos son en contra de la política del Presidente Donald Trump hacia el Medio Oriente, quien parece estar de acuerdo con el Primer Ministro Israelí en entregarle Gaza a Trump para que desarrolle un “proyecto inmobiliario”.

El suscrito no pretende analizar la conducta personal del Presidente Donald Trump, sino su “Conducta Presidencial” a través de sus políticas. Intento analizar que subyace o que intereses están detrás de las políticas del actual Presidente Donald Trump y porqué, el suscrito ha encontrado una teoría sobre el poder, desarrollada por los autores aquí abajo señalados.

Las excéntricas y repudiadas políticas del Presidente de los Estados Unidos, conducen a creer, que Donald Trump, atraviesa el Síndrome de la Enfermedad del Poder, desarrolladas por David Owens y Jonathan Davidson, Político y Psicólogo, teoría más conocida como el “Síndrome de Hubris.”

El Síndrome de la Enfermedad del Poder es definida, como un cambio radical en el carácter habitual del hombre, cuando ocupa el puesto de líder o cargos de gran relevancia, en cualquier área. Estos autores describen a esta patología de la Enfermedad del Poder, como la exhibición de arrogancias, despotismo, crueldad, egolatría y complejo de superioridad, donde el hombre en el cargo, pierde su moral, por la soberbia que le dimana estar en el Poder. Estas características son congruentes o similares a las que exhibe Donald Trump, quien emplea todos los adjetivos e hipérboles a su favor, como indicando que él es un ser especial, un “enviado” de Dios quien le salvó de atentados, para que se posicionara cómo “El Salvador” de la tierra. El Presidente Trump difunde la sensación de creerse inmune y que goza de impunidad, independiente de los actos o delitos que cometa, porque su ego está por encima de los mortales.

Ir al baño y hacer sus necesidades, tal vez sea la afrenta más grande a su poder, pues se sienta en el “trono” de los mortales.

Este síndrome de la Enfermedad del Poder, también lo describió Pierre Accoce en su obra “Aquellos Enfermos que nos Gobernaron”, en ello demuestra que la Enfermedad del Poder va más allá de las limitaciones naturales del hombre finito y mortal.

Esta Enfermedad del Poder recientemente desarrollada, ha existido desde la aparición del hombre con la toma del Poder por, Caligula, Hitler, Idi Amin, Stalin y una larga lista, quienes se destacaron por sus excentricidades, crueldades en el poder y por mantenerse en el poder a toda costa.

Desde el primer momento en que el Presidente Donald Trump asumió el cargo, demostró que padecía profunda y visiblemente de este síndrome de la Enfermedad del Poder. Cuando habló en la Asamblea General de la ONU, a segundos de su intervención causó en forma espontánea unánimes carcajadas, al decir que su gobierno era el mejor de todas las administraciones anteriores. Cuando contrajo el Covid, salió a saludar, como indicando que no tenía nada y que él era inmune a esa enfermedad, pero estaba enfermo. Por último, cuando perdió el Poder en las elecciones el 2020, desconoció el resultado de las elecciones y convocó una revuelta en el Capitolio para desconocerlas.

El suscrito cree que las excentricidades políticas del Presidente Donald Trump, lo conducirán como efecto lo está pasando, una crisis de confianza a nivel internacional, pero que también le causarán una crisis interna dentro de su propio Gabinete, donde habrán despidos, renuncias y disgustos, visibilizándose a futuro, un “impeachment político” a su gestión, al estilo Richard Nixon.

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