Elvis Amoroso no es el CNE, es sólo su presidente
Opinión – ING. Reinaldo Quijada, coordinador nacional de la UPP89.
El Poder Electoral no es una persona o un grupo de personas, no es un señor que se llama Elvis Amoroso y que, circunstancialmente, ocupa el cargo de Presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE). Los PODERES son sus instituciones, sus leyes e instrumentos legales, y no personas que ocupan unos cargos.
El Poder Electoral, es lo que establece la CRBV en sus artículos 292 al 298, y que se ejerce por vía del CNE como ente rector. El CNE es la única institución legítima para normar, dirigir y supervisar las actividades electorales y para “garantizar el cumplimiento de los principios constitucionales atribuidos al Poder Electoral”. El Poder Electoral son la Ley Orgánica del Poder Electoral, la Ley Orgánica de Procesos Electorales y demás reglamentos electorales. El Poder Electoral son los instrumentos electorales que establecen las leyes antes mencionadas, como el sistema automatizado de votación, las ACTAS ELECTORALES, las auditorías (entre ellas, la importante verificación ciudadana), los TESTIGOS, etc.
Insistimos. El CNE no es su presidente Elvis Amoroso, hasta hace poco tiempo miembro de la directiva del partido de gobierno PSUV, ni el rector y vicepresidente del CNE, Carlos Quintero, otra ficha del partido de gobierno. Ellos ciertamente ocupan unos cargos en la actualidad pero esos cargos son circunstanciales y se deben a la CRBV y a los instrumentos legales que son permanentes. La Ley Orgánica del Poder Electoral dice TEXTUALMENTE en su artículo 9. Numeral 4. “Requisitos de Elegibilidad (de los rectores): No estar vinculado o vinculada a organizaciones con fines políticos”. Este requisito no lo cumplen Elvis Amoroso, Carlos Quintero y casi ningún rector.
Los hechos. El escrutinio electoral se inició a las 6 p.m. Alrededor de las 7 p.m. se interrumpe la transmisión de los resultados. El presidente del CNE dice que fue “una agresión en contra del sistema de transmisión de datos que retrasó de manera adversa la transmisión de resultados”, habló de una “acción terrorista”, el fiscal general señala que fue un “hacker desde Macedonia del Norte”. Entre 6 y 7 p.m., un periodo de una hora, se fueron transmitiendo y recibiendo ACTAS ELECTORALES de cada mesa, la inmensa mayoría, casi la totalidad, señalaban un triunfo arrollador del candidato Edmundo González Urrutia. Muchas de ellas circularon, de inmediato, por las redes, las tuvo el ciudadano común.
Hoy se tienen, en mano, en físico, el 73,2% de esas ACTAS ELECTORALES de cada mesa y ya están publicadas – la copia escaneada de esas ACTAS – en un portal web, como lo anunció ayer María Corina Machado. A la fecha, más de 48 horas después, el CNE no ha publicado, en su página WEB, como siempre lo ha hecho, los resultados, centro por centro, mesa por mesa, resultados que pudieran contradecir la información anterior de las ACTAS, que se difundieron desde el propio 28 de julio, una vez empezó el escrutinio. Los testigos del PSUV también tienen las ACTAS y si el portal web del CNE fue también hackeado, el ente comicial debería tener suficientes recursos técnicos para montar otro portal o mecanismo de difusión.
El CNE tampoco cumplió con lo que establece la Ley Orgánica de Procesos Electorales, en el Título XI, Auditorias, artículo 131, la “verificación de los comprobantes de votación”, la llamada “verificación ciudadana” que es un acto público que debe hacerse, por sorteo, en 54% de las mesas, el mismo día del acto electoral. Incumplimiento legal grave del CNE y de su directiva. Un hacker podría haber intervenido el sistema de transmisión de datos pero no podía alterar los comprobantes o papeletas de votación.Coincidimos con el gobierno y sus voceros, el CNE es el único ente electoral legítimo. Respetamos las leyes del Poder Electoral y sus instrumentos legales.
Las ACTAS ELECTORALES del CNE hablaron. Sus leyes e instrumentos legales hablaron. Y a través de ellas, habló el país. Y lo hizo el pueblo, el ciudadano común que es la esencia de la vida política.Las ACTAS ELECTORALES, de cada mesa, son el único instrumento que expresa la realidad. Es una fotografía de lo sucedido.