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La magia de la Navidad es propicia para que ocurran todos los milagros inimaginables, incluso el que el Niño Jesús o Niño Dios, como mejor prefiera, accediera a dar una entrevista a las pocas horas de su nacimiento, flanqueado por la Virgen, José, los Reyes Magos y, como grandes testigos de excepción los animales presentes en su humilde Pesebre en Belén. Hablando fluidamente, todo un prodigio para un recién nacido, con conocimiento de causa y sin pausa.
Al fondo se oyen los estruendos de los bombazos en Gaza, Siria, el Líbano e Israel, con la luminosidad del fuego incandescente y que no es precisamente la estrella que iluminó y guió a Melchor, Gaspar y Baltazar; todo lo contrario, la evitaron para poder llegar vivos a conocer al Redentor que acaba de nacer.
*Entrevistador (E):* ¿Qué le parece este recibimiento?
*Niño Jesús (NJ):* Buenas noches. Antes de venir a este convulsionado Mundo ya estaba en conocimiento de esta lamentable y dolorosa situación en el Medio Oriente y en otros lugares de esta sufrida y maltratada Tierra, todo por la ambición desmedida de sus habitantes, quienes no tienen corazón para mi Padre y mucho menos para con sus semejantes.
*E:*¿Qué mensaje trae para la humanidad en esta Navidad?
*NJ:* Como enviado de mi Padre, estoy aquí, como testigos están mi Madre y mi Papá, para recordarles a todas las Naciones que la Paz y el Amor son fundamentales, no sólo ahora sino a través de los siglos para vivir en armonía. Más en estos tiempos tan agitados, en donde los hombres han apartado a Dios de sus sentimientos. Es necesario unirse, ayudar a los más necesitados, sin importar raza, ideología o idioma. Todos somos hijos de Dios, hay que brindar esperanza de vida a quienes más los requieran: a los desvalidos y a los más pobres dentro los más necesitados.
*E:* En muchos lugares del mundo, como Venezuela, entre otros, la situación es dramática, desde todo punto de vista. ¿Qué les dirías a aquellos que pasan todo tipo de penurias y calamidades como hambrunas, encarcelamientos, migraciones forzosas, persecuciones, amedrentamientos, falta de empleos, libertades y democracia, sometidos por regímenes tiránicos y criminales?
*NJ:* Les señalaría que no pierdan la Fe, que los cambios por venir gozan de la bendición de Dios Nuestro Señor, mi Padre Amado. Él nunca falla y siempre le cumple a los más necesitados, a los sedientos de Justicia. La Verdad es una sola y siempre se impone. Cada gesto de bondad y solidaridad entre nosotros es visto con buenos ojos por mí Padre y, por muy pequeños que sean, pueden tener un gran impacto positivo en los anhelos de cambio al que aspira una mayoría de la población, de más de ocho millones de venezolanos que así lo decidieron hace pocos meses. La compasión entre todos como hermanos arrojará luces en los primeros días de enero, iluminando los caminos más oscuros hasta encontrar los destellos de la deseada y soñada Libertad colectiva.
*E:* ¿Cómo podemos celebrar esta Navidad en Venezuela de manera significativa, bajo el yugo de la opresión, de las amenazas de los fusiles, las bayonetas, de la prisión y, en muchos casos, con desapariciones con un altísimo costo de la vida misma?
*NJ:* Celebrar la Navidad significa compartir y dar, por encima de recibir. En el caso venezolano son muchas las alegrías y felicidad que recibirán los habitantes de esa hermosa tierra, y los que están afuera también, ya que mi Padre Celestial los bendijo sobre manera. Este 2025 será el estallido fulgurante de la democracia y el renacer de todos los venezolanos de bien. El mal será expulsado y arrojado al olvido. Veremos caravanas de venezolanos en feliz reencuentro con sus familiares, quienes han estado separados por años, con la soledad como única compañía y la discriminación como efecto de algo tan despreciable como la xenofobia. Igualmente, habrá miles de voluntarios donando alimentos, apoyando a los más vulnerables, a los más necesitados y desasistidos de los recursos básicos para subsistir. Especialmente se centrarán en niños, ancianos y mujeres hambrientos y carentes de salud. Acompañándolos en infinitas jornadas de solidaridad como nunca se había visto en esa nación.
Estoy consciente que la situación en Venezuela en esta Navidad es compleja. A lo largo de los últimos 25 años, la población ha sido privada de los recursos más elementales, de parte de un poder delincuencial. El país ha enfrentado crisis y penurias políticas, económicas y sociales, gracias a un modelo que va en contra de los principios fundamentales del cristianismo. Esto ha afectado la vida de millones de venezolanos, traduciéndose en escasez de alimentos, hiperinflación y en una alta migración forzada, resaltó el Niño Jesús desde la calidez de su humilde Pesebre.
Sin embargo y a pesar de tales desafíos, el futuro inmediato para Venezuela se vislumbra brillante de la mano de dos grandes líderes, quienes están protegidos por Nuestro Señor –enfatizó el recién nacido-. “En esta Navidad los insto a unirse a pos del objetivo añorado por años, celebren con prudencia mi nacimiento, creando espacios para la esperanza de lo que se concretará este 10 de enero próximo”.
*E:* Muchos venezolanos han emigrado a otros países buscando mejores oportunidades. ¿Qué mensaje tiene para ellos el Niño Jesús, especialmente para aquellos que se sienten solos en estas Navidades?
*NJ:* A todos aquellos que están lejos de sus hogares que pronto las puertas de una nueva vida y un reencuentro con sus seres queridos será una gran realidad, quiero recordarles que el amor trasciende fronteras. Aunque están lejos, por los momentos, les puedo asegurar que esta será la última Navidad que pasarán sin sus familias y fuera de sus hogares. La Fe y la Esperanza son valores universales desde el inicio de la humanidad, y se los digo a manera de consuelo, pero no dejen de luchar y brindar por un nuevo porvenir luminoso que ya se asoma, donde el mal será derrotado con toda seguridad. Los perseguidos y encarcelados verán la luz de un nuevo amanecer.
*E:* Por último, Niño Jesús, ¿qué deseo especial tienes para Venezuela en esta Navidad?
*NJ:* Mi deseo es que los corazones de todos los venezolanos se llenen de esperanza y que la paz sea el camino a seguir. Que cada persona en Venezuela y fuera de ella sienta la fuerza del amor compartido y el deseo de unirse para construir el mejor de los futuros posibles, donde todos puedan prosperar económica y espiritualmente. Recuerden que con Fe y Unidad todo es posible para llegar Hasta el Final y poder Cobrar.